Tengo un nuevo favorito en novelones románticos, aunque, como dice el narrador al principio de la película, no se trata de una historia de amor.
Una de los requerimientos del cine, para disfrutar una película, es poder compenetrarse a nivel psicológico con los personajes; desarrollar a lo largo de la película una cierta empatía con ellos, más allá del personaje en sí. Me refiero a que el no ser Hobbits no nos impide compartir el peso de Frodo ante la tarea de llevar el anillo a los confines mismos de Mordor; ni que por no ser escoceses del siglo XII, no sintamos el ahogo en la garganta al oir a William Wallace gritar Freeeedoooooom.
Sin embargo, las comedias y/o dramas románticos de Hollywood no logran ese efecto en mi, porque no me siento identificado con el boludo que tiene una tienda de libros de viajes y se cruza y termina casando con la actriz más bonita y mejor paga del cine; ni tampoco con el nerd que a fuerza de primero pasar por el amigo gay de la más bonita del curso, termina ganándosela mostrando su lado sensible e intelectual.
Sin embargo, lo que no pudo lograr ninguna otra de las llamadas "cheesy movies" o, como diríamos nosotros, películas empalagosas, 500 días de verano se lleva todos mis favores.
Me sentí muy identificado con el personaje, desde las situaciones que "genera" para hacerle entender a Summer que "está todo bien", hasta el dolor que siente al saber que no era una incapacidad innata de amar, sino que simplemente no era él a quien debía amar.
En definitiva, una película altamente recomendable por los tintes realistas de las historias de amor cotideanas, que más que hacernos desear alguien como el/la protagonista, poniendo en jaque la relación con tu pareja (
según este artículo), nos da una interesante visión del amor, por no decir un baldazo de fría realidad.
Dejo, como un bonus, algunas citas de la película, que mojaron la peluca:
Summer: I woke up one morning and I just knew.
Tom: Knew what?
Summer: What I was never sure of with you.
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Rachel Hansen: Just because she likes the same bizzaro crap you do doesn't mean she's your soul mate.
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Rachel Hansen: Look, I know you think she was the one, but I don't. Now, I think you're just remembering the good stuff. Next time you look back, I, uh, I really think you should look again.
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Summer: Well, you know, I guess it's 'cause I was sitting in a deli and reading Dorian Gray and a guy comes up to me and asks me about it and... now he's my husband.
Tom: Yeah. And... so?
Summer: So, what if I'd gone to the movies? What if I had gone somewhere else for lunch? What if I'd gotten there 10 minutes later? It was - it was meant to be. And... I just kept thinking... Tom was right.
Tom: No.
Summer: Yeah, I did.
[
laughs]
Summer: I did. It just wasn't me that you were right about.