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lunes, 18 de octubre de 2010

Dreaming My Dreams

La madrugada del domingo tuve un sueño tan extraño, pero a la vez tan real, que es digno de un cortometraje o, de extenderse la trama, hasta daría para película de Darren Arnonofsky o Vincent Ward.
Resulta que me encuentro en la mitad del sueño en primera persona (veo todo a través d emis ojos y siento lo que me pasa), como siempre sin saber cómo ni cuándo llegué a ese punto, intentando hablar por teléfono con Belén, la hermana de un amigo con la que había quedado ir al cine. Cada intento pasaba directo al contestador, por lo que decidí ir para la casa (un departamento muy estilo yankie y en un clima invernal, que hacía sacar vapor por la boca) a ver qué pasaba.
La puerta entreabierta me obligó a pasar y, una vez adentro, empecé a llamarla por su nombre, recorriendo las habitaciones y subiendo al primer piso donde estaba su cuarto. Sin respuesta a mis llamados estoy por volver a bajar, cuando veo una luz tenue que sale de uno de los cuartos. Al acercarme la veo(?) a ella e inmediatamente (no sé cómo) supe que algo estaba mal. A la carrera bajo la escalera y cuando intento salir a la calle para buscar ayuda, veo con el rabillo del ojo una siluta negra sobre la pared blanca y pálida, oscurecida por la penumbra de la noche.
No alcanzo a darme vuelta, cuando escucho el disparo y caigo al piso y hasta ahí es una historia como cualquiera; pero inmediatamente caído, es como si viera un flashback de qué hubiera pasado si lo veía antes y podía defenderme y cómo le hubiese hecho tanto daño en venganza por lo que le hizo a Belén, hasta dejar la cabeza desprendida del cuerpo y en el piso de madera del living... Pero como eso no pasó, la imagen hace un fade white y lo que sigue es ir acercándome a la cama de ella, para confortarla de su sollozo. La escucho diciendo: "por qué, por qué...", mientras tenía una carta apretada entre los dedos. En ese mismo instante me doy cuenta que la carta era para mi y que no había sido el héroe ,sino una víctima más; y que estaba a su lado pero ella no podía verme, ni sentirme, porque estaba a su lado, pero en otro plano. 
Y ahí fue que me desperté, con unas terribles ganas de llorar.

4 comentarios:

El alter ego de Mabel dijo...

hice el cbc de psicología y vi sexto sentido. me siento altamente calificada para interpretar el onírico, si interesa

AS dijo...

Con tales credenciales, no diga más y comience con el análisis.
Total, ya todo el que me lee sabe que estoy chapa... qué novedad va a traer que me afecte?

Loreley dijo...

uhhhh nene! muy obvio lo tuyo: estás enamorado de Belen, por eso el sentimiento de protección, de miedo de que alguien la lastime, y hay una sombra por ahí que amenaza la relación...una sombra que puede ser de parte de ella, pero tambien puede ser tuya propia.
La carta es un secreto tuyo hacia ella, y la sensación de estar en otro plano es la sensación que tenes tambien estando conciente.
Basta de delirios, me parece que la sopita Luchetti me afectó al cerebro.
Beso

AS dijo...

Jaja! Lore, me encanta la interpretación psicoanalítica pseudo-adivina que hiciste... sin embargo, es casi por completo equivocada, excepto por lo de estar en otro plano, y lo de la sopita, claro, ja!
Beso!

 

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