Confieso tener una doble vida. Es algo que llegado un momento se hace intolerable y ya no sé quién soy realmente y cuál debería ser. A diferencia de mis asociaciones con las dobles personalidades, lejos de ser un multimillonario que mientras maneja sus múltiples empresas durante el día lucha contral el crimen por las noches, o un alienígena con superpoderes escondido tras un torpe reportero, mi alterego es una especie de Mr. Hyde, al cual no puedo dominar aunque intente amordazarlo y callarlo.
Esa entidad que se apodera de mi conciencia y nubla la voluntad sobre mis acciones, es mi obsesión por un tema específico (ninguno en particular, ya que va cambiando dependiendo de la época), que ocupa mi cabeza y condiciona las demás actividades.
Para no hablar de la llamada que esperé toda la semana y no recibí, pese a controlar el celular a cada rato por si no tenía servicio o si se había pasado a silencioso sin darme cuenta, me vi el viernes en un asado con compañeros de la oficina, sin poder disfrutar el momento por la conferencia que tenía que dar al día siguiente. Mientras escuchaba de fondo una charla en la que se suponía estaba involucrado y mi mirada extraviada percibía los primeros suficientemente "alegres" como para empezar a dibujar unos pasos de baile al ritmo de una cumbiancha, en mi cabeza estaba la necesidad de irme para terminar de preparar la conferencia, a la que estaba seguro no iba a llegar como pretendía.
Tiendo a sentirme responsable (que no es lo mismo que serlo) sobre las cosas y eso no me permite disfrutar del momento, pese a que siempre hablo de ocuparse a su debido tiempo en lugar de PREocuparse antes que las cosas sucedan. Me pasa cuando invito gente a casa, a la que atiendo preocupado de que se sientan bien, en lugar de que las cosas pasen y siendo supuestamente el agasajado, despreocuparme y que cada uno haga lo que quiera mientras que TODOS disfrutemos.
Espero no terminar como Dr. Jekyll, consumido por su alterego. Por lo menos soy conciente de querer cambiarlo y tengo la ventaja de no necesitar tomar nada.
5 comentarios:
Uno siempre tiene un lado oscuro que desearia "cambiar", pero creo que muchas veces el querer "cambiar" es justamente lo que impide el movimiento...
Cuando me harto de querer cambiar y me digo: "y bueno che soy así y punto" los colores internos se armonizan en un degrade mucho más equilibrado, en donde no cambia la esencia sino las proporciones e intensidades del color.
Me salio muy místico el comentario? jajajajajaja te mando un OM simbólico jajajaja :o)
P.D.: Olvidate de "La Llamada" en la espera de que "ese" evento suceda seguramente te estas perdiendo otro monton de cosas.
Redo, gracias por el comment!
Me gusta lo místico, jaja. Aunque no sé si el equilibrio se va a dar "por añadidura", sin que uno quiera cambiar y el decir "yo soy así" parece ser un conformismo.
Lo de la llamada, ya a esta altura la di por descartada. Habrá que abrir los ojos a es montón de otras cosas(?).
Beso!
mmmm iba a aclarar, pero por lo general aclarar oscurece jajajajaja
no, simplemente queria decir que la frase se puede entender desde un conformismo, no obstante existe una tajante diferencia entre conformarse y aceptar aquello que al fin y al cabo conforma ese todo que somos....
Mandala y beso jajajajaj
Al final no entendí si te fué bien o mal en la charla que tenias que dar!
Me vas a contar?
Si tanto te preocupaba la llamada al punto de darte cuenta que entorpecia tu vida normal, debias haberla llamado, total! el no ya lo tenés!
Beso.
Redo, podría discutir mucho sobre destino y libre albedrío, así que mejor no, jaja!
Lore, me fue bien, aunque el diluvio hizo que mucha gente no fuera. Y no sé si era importante, pero ocupó lugar en mi cabeza (más del que me hubiese gustado) y no puedo llamar cada dos días! Recibió el mensaje, sabrá qué hacer o dejar de hacer.
Besos!
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